La ética empresarial es un valor que hoy en día se solapa con valores como competencia, rentabilidad, estrategias greedy...
En esta competencia, el capitalismo determina que el valor predominante resulte la rentabilidad y el negocio en detrimento de la ética.
Además como tendencia esto se extrapola a empleados, que si no son lo suficientemente competitivos para las empresas, no serán factor diferenciador entre empresas de modo que se distingan de sus posibles competidores.
Sucede así que los empleados se convierten en mercancía a través de la cual la competitividad entre empresas se convierte en agresividad sin importar ni atenerse a ningún criterio ético.
La mayoría de estos comportamientos se inician en la falta de ética de las personas, si bien las empresas no se preocupan mucho más en observar ni códigos de conducta ni ética empresarial alguna.
En esta competencia, el capitalismo determina que el valor predominante resulte la rentabilidad y el negocio en detrimento de la ética.
Además como tendencia esto se extrapola a empleados, que si no son lo suficientemente competitivos para las empresas, no serán factor diferenciador entre empresas de modo que se distingan de sus posibles competidores.
Sucede así que los empleados se convierten en mercancía a través de la cual la competitividad entre empresas se convierte en agresividad sin importar ni atenerse a ningún criterio ético.
La mayoría de estos comportamientos se inician en la falta de ética de las personas, si bien las empresas no se preocupan mucho más en observar ni códigos de conducta ni ética empresarial alguna.
Los medios de comunicación no son ajenos a estas conductas, si bien su caso es más llamativo, ya que como agravante está el hecho de que se olvidan de sus propios códigos. Periódicamente se revisan los códigos aplicados a la mayoría de los medios de comunicación para concluir que éstos son sistemáticamente violados sin el menor rubor ni ánimo de enmienda. Baste como ejemplo las emisiones en horario infantil, la "objetividad" de determinadas cadenas en pro de ideologías políticas, ect.
Aún así, se observa una tendencia en cuanto a "camuflar" o "disimular" la imagen negativa de ciertas empresas con inversiones en campañas de imagen encaminadas a publicitar su gran labor social, aún cuando se gasta más en publicidad que en la propia labor social. Una vez más no importa lo que seas sino la imagen que des.
Aún así, se observa una tendencia en cuanto a "camuflar" o "disimular" la imagen negativa de ciertas empresas con inversiones en campañas de imagen encaminadas a publicitar su gran labor social, aún cuando se gasta más en publicidad que en la propia labor social. Una vez más no importa lo que seas sino la imagen que des.
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