Jennie Yabroff en su texto publicado para NEWSWEEK en Marzo de 2008, nos da una visión de los jóvenes nacidos posteriormente a 1982, identificados como pertenecientes a la "generación mírame" (Look at Me Generation).
Esta generación de individuos nacidos y desarrollados bajo la influencia en la sociedad de las tecnologías de la información y la comunicación, variará en cada región o país en cuanto a que el desarrollo de la tecnologías de la información y la comunicación se produce con algunos años de diferencia.
En todo caso se puede considerar que existen paralelismos en cuanto a las generaciones de todos los países en los cuales el uso de dichas tecnologías está generalizado al conjunto de la sociedad.
Esta generación habituada a la tecnología, a internet, donde se pueden establecer relaciones virtuales, donde los juegos de ordenador ofrecen posibilidades inimaginadas hasta el momento, son los jóvenes que usan su imagen, sus fotografías e información privada en sitios públicos para darse a conocer, encontrarse, llegando a un casi exhibicionismo sobre el cual algunos sociólogos cuestionan el efecto sobre la personalidad de los jóvenes.
En cierto sentido la imagen que se proyecta o la imagen percibida por los demás es asumida de modo que en ocasiones no se puede contrarrestar con la personalidad propia. Esto difumina la realidad, pues llega a confundirse la imagen virtual (entendida como personalidad) y la imagen real.
Esta "realidad" puede en determinadas circunstancias constituir un problema en tanto en cuanto no podamos controlar las consecuencias no deseadas de la expansión de nuestra imagen.
Esta generación de individuos nacidos y desarrollados bajo la influencia en la sociedad de las tecnologías de la información y la comunicación, variará en cada región o país en cuanto a que el desarrollo de la tecnologías de la información y la comunicación se produce con algunos años de diferencia.
En todo caso se puede considerar que existen paralelismos en cuanto a las generaciones de todos los países en los cuales el uso de dichas tecnologías está generalizado al conjunto de la sociedad.
Esta generación habituada a la tecnología, a internet, donde se pueden establecer relaciones virtuales, donde los juegos de ordenador ofrecen posibilidades inimaginadas hasta el momento, son los jóvenes que usan su imagen, sus fotografías e información privada en sitios públicos para darse a conocer, encontrarse, llegando a un casi exhibicionismo sobre el cual algunos sociólogos cuestionan el efecto sobre la personalidad de los jóvenes.
En cierto sentido la imagen que se proyecta o la imagen percibida por los demás es asumida de modo que en ocasiones no se puede contrarrestar con la personalidad propia. Esto difumina la realidad, pues llega a confundirse la imagen virtual (entendida como personalidad) y la imagen real.
Esta "realidad" puede en determinadas circunstancias constituir un problema en tanto en cuanto no podamos controlar las consecuencias no deseadas de la expansión de nuestra imagen.
En este sentido educadores, sociedad y familia han de contribuir a que esta generación, sin olvidar la realidad en la que está inmersa, pueda ser dueña de su propia imagen.
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